Hace 4 años que recibí la llamada de Miguel.

A priori, un tipo normal, que cuando me explicó su ocurrencia, pensé. Este tío es un crack!

Su proyecto nacido en 2012, en Madrid, lo quería trasladar, a parte de a más ciudades, a Donostia. Y concretamente me llamaba a mi para hacerme cargo del tema. Pues claro!!!

Me pareció un proyecto emocionante, y me encantó que diera conmigo para ser la responsable del mismo en Donostia, pero nunca pensé que fuera tan cruda la realidad.

El primer año lo organizamos desde EKINTZA ikastola, con familiares y amigos, pero al vivir la experiencia, pensé que lo mejor sería trasladarlo al alumnado de la ikastola. Quería que ellos también fueran conscientes de la realizad, y pudieran hacer una valoración de la situación de cada PSH.

Este es el segundo año que lo organizamos de esta manera, y debo de decir, que, es aún más enriquecedor que cuando empezamos hace cuatro años. Ver cómo el alumnado empatiza y comparte momentos con las personas sin hogar es un orgullo para todos los que hacemos voluntariados express en Donostia, y sobre todo para mi. El objetivo es que ellos hagan un mundo mejor, siendo conscientes de la realidad que les rodea. 

Este año nos concentramos en la ikastola a las 6:30 de la tarde, para, explicarles en qué iba a consistir la noche. Fuimos a recoger los Kit, y volvimos al centro a organizarlo todo. Salimos hacia las 20:30, y repartimos todos los kits. Quedaron dos, que los entregamos al día siguiente por la mañana.  Conocimos a gente de Camerún, gente que llevaba 10 años en la calle, 2 meses en la calle, … cada situación era única y diferente. Algunos querían hablar, otro no querían hablar. Respetamos el tiempo y espacio de cada uno. 

Una vez más tengo que dar las gracias a Miguel,  por esta “liada” en la que nos ha metido. Una “movida” de la que estoy muy orgullosa pertenecer, y hacer participe a jóvenes que serán el futuro de un mundo mejor.

Un abrazo.

Ane